La mejor elección...

Esto tiene tela, pero una respuesta muy fácil. Una lectora, V.G., manda esto: 

"Querido Freddy, empiezo a darme cuenta de que tengo un bloqueo impresionante con los hombres. Verás, te cuento... Después de mi divorcio y dos años y pico conociendo especímenes de todas las clases habidas y por haber (eso sí, el 90% de ellos con un claro objetivo de acercamiento sexual desde el momento 0'2) llego a la conclusión de que no puedo añadir más carga innecesaria a mi vida y, que a día de hoy, lo conocido, no me  compensa... quiero decir, he conocido a un par de hombres maravillosos pero con uno de ellos siento que soy como si fuera su madre y con el otro, tengo que pedir audiencia para verlo cada dos meses porque tiene una vida muy cargada de trabajo, hijos, obras sociales y encima vive en el quinto pino... así que no compensa, por lo menos para mi, echar un polvo cada dos meses mientras la comunicación por wassap es prácticamente nula. Por otro lado sigo recibiendo mensajes y propuestas de otros chicos y hombres de estos dos años atrás con los que tuve claro que no iba a ningún lado con ellos y en su momento puse fin a esos encuentros que se resumían a meros intercambios de fluidos. Y es que no disfruto haciendo sexo de esa manera, sintiéndome una muñeca hinchable o peor aún... el pavo de día de acción de gracias, donde encima tienes que mostrarte agradecida al "cocinero" de haberte despachado un buen relleno y oírlo presumir de que tiene el mejor"utensilio de cocina" para ello y a los diez minutos se presta a repetir la labor con esos aires machirulos mientras te va indicando las distintas posiciones que tienes que adoptar para que la faena se realice con éxito (y si no, ya sabes que al más mínimo gatillazo la culpable eres tú por no haberte posicionado de forma correcta, etc, etc, etc...) Después de todo eso, de haberme cuestionado incluso una posible bisexualidad, o qué me gustarán las mujeres... pues sí, me encanta tenerlas de amigas, confidentes, maestras de vida, pero, y muy a mi pesar, me siguen gustando los hombres. Crees que sería bueno abrirme a experiencias nuevas, con mujeres por ejemplo? Pensar en tener sexo con una mujer no me pone, pero es que estoy tan asqueada por mi experiencia con los hombres que ya tampoco me ponen ellos. ¿Qué me aconsejas?"

Como ya te he dicho antes, la respuesta es muy fácil. Estas en una época de tu vida, que no es que estés asexuada, en la cual no tienes ganas de complicaciones. No necesitas ni a un hombre ni a una mujer para sentirte completa o ¿es que quieres impresionar a alguien?

Enfócate en aquello que te hace feliz y no te obligues a querer encontrar a alguien al que tener a tu lado. Seguro que tienes más gente a tu alrededor que cubrirán las necesidades que suele cubrir una pareja. Comparte con ellos tus éxitos y fracasos y verás que se alegrarán por unos y te ayudarán en los otros. Tú mantente feliz, sana y positiva y verás que el día que menos te lo esperes, cuando ya no busques, aparecerá alguien que hará tambalear el mundo que te hayas construido y entonces, verás que ha merecido la pena la espera. Como tú bien dices, no necesitas más cargas innecesarias. Canta, baila, sonríe como una loca y verás que eso puede compensar muchos orgasmos desperdiciados.

Si con esos chicos, con los que compartes ratitos, no sientes nada y encima te sientes como obligada o presionada, pasa de ellos. Por cierto, si el chulo sufre un gatillazo, no es culpa tuya. Y si encima tiene el valor de echártelo en cara, dile que tiene el pene tan pequeño que en esa postura no sientes nada porque no llega muy profundo...y así le arruínas la vida. Dile que tampoco él es la Paulova como para venir pidiendo flexibilidad y que si quiere que seas  una mujer chicle primero tiene que demostrarte que se la puede chupar el solito. QUID PRO QUO, querida...

Y mientras, en tu soledad, si necesitas un buen meneo o un polvazo que te quite "to el sentío", recurre a otras opciones. Cómprate un amigo de látex que vibre, juega contigo misma, págate un chulo, y si quieres probar con una mujer, hazlo. No pierdes nada con probar. Ya lo dijo una vez la gran Lola Flores: "¿Quién no se ha dado un pipazo con alguna amiga?".